El Retiro comenzará con un momento de oración para continuar con una meditación. Después de la charla habrá un tiempo de diálogo y reflexión compartida. Con la celebración de la Eucaristía se concluirá.
Estos retiros son un instrumento para cultivar la espiritualidad que debe animar al agente de Cáritas. «El tiempo dedicado a Dios en la oración no sólo deja de ser un obstáculo para la eficacia y la dedicación al amor al prójimo, sino que es en realidad una fuente inagotable para ello» nos recuerda Benedicto XVI en «Dios es amor», nº 36. El retiro se orienta a tomar conciencia y experimentar el amor que Dios nos tiene a cada uno para que podamos amar con radicalidad a los hermanos que sufren.
Nos recuerda el Papa en su mensaje para esta Cuaresma que este tiempo «nos ofrece una ocasión providencial para profundizar en el sentido y el valor del ser cristianos, y nos estimula a descubrir de nuevo la misericordia de Dios para que también nosotros lleguemos a ser misericordiosos con nuestros hermanos», en el caso de los agentes de Cáritas, en el ejercicio de la Caridad.