La propuesta es un estilo que está en la ráiz del mensaje y la vida de Jesús para acercar el Reino y responder así al sueño de Dios sobre la humanidad y la tierra entera.
Una conversión movilizadora de un cuidado generoso y lleno de ternura hacia toda la Creación, que implica gratitud y gratuidad, la amorosa conciencia de nuestra conexión con el resto de criaturas.
Esa conversión debe trascender nuestra propia persona, alcanzar a la comunidad y a la Iglesia toda. Una conversión comunitaria cuyos frutos serán la acogida, el respeto por los demás y por la naturaleza, con sus rítmos y necesidades, la construcción de unas sociedades donde se respire cordialidad, la inclusión, la defensa de los derechos humanos.
Recorramos este camino de conversión "ecológica" confiando siempre en que, a nuestro lado, Dios, y el mismo Jesús, nos guían y acompañan con su luz.